Mesoterapia Facial

Porque los síntomas del envejecimiento son una suma de imperfecciones que se acumulan, con mesoterapia podemos conseguir un enfoque anti-envejecimiento global a través de técnicas que tratan la piel a todos los niveles.

¿Por qué recurrir a la mesoterapia?

Con el tiempo nuestra piel cambia y se envejece. Por ello utilizamos productos cosméticos que para que la mantengan en buen estado.

No obstante, las capas profundas de la piel siguen perdiendo elementos vitales como el ácido hialurónico y el colágeno. Estos daños que se experimentan en profundidad repercuten en el exterior: deshidratación, pérdida de tonicidad, pequeñas arrugas… dando al rostro un aspecto envejecido.

Para recuperar y conservar la calidad de una piel joven. Una piel profundamente hidratada, firme y brillante.

La mesoterapia es una auténtica infiltración de vitalidad, estimula el interior de la piel sin modificar la forma ni la expresión del rostro. Gracias a la solución utilizada aporta a la dermis ácido hialurónico e ingredientes nutritivos esenciales para la piel, nutriendo ésta en profundidad, alisando las pequeñas arrugas y reaviva la luminosidad. Permite tratar el rostro, cuello, escote y las manos.

La sesión de mesoterapia dura alrededor de 20 minutos y consiste en una serie de múltiples micro-inyecciones en la dermis, sobre la totalidad del rostro o en la zona a tratar.

Para obtener un resultado óptimo y duradero son necesarias entre 3 y 5 sesiones cómo mínimo, espaciadas unos 15 días. También se recomienda una sesión de mantenimiento 1 o 2 veces al año.